En la reforma parcial que hemos ejecutado en la localidad costera destacamos los materiales: acero inoxidable y aluminio para una duración, estética y funcionalidad impecable.
El acero inoxidable es un material excelente para exteriores. Se trata de un elemento seguro y que requiere poca conversación, en general. No se oxida y tampoco le afecta la climatología, por lo que durarán mucho y en muy buen estado en esta vivienda que acabamos de reformar en Fuenterrabía, Gipuzkoa.
Las barandillas colocadas en terraza y escaleras de acceso son de alta resistencia, gran durabilidad y no implican mantenimiento ni gastos de restauración. Además, tienen un diseño versátil y visten fabulosamente el espacio.
El aluminio nos seduce especialmente. Es un material liviano que cumple una función decorativa excelente, pero sobre todo nos ofrece seguridad.
El aluminio es un material muy resistente, que al entrar en la categoría de los no ferrosos, apenas se oxida. Además, resiste sin dañarse las inclemencias del tiempo más desfavorables y son perfectamente válidas para exteriores como el de esta vivienda situada en plena costa vasca.
En definitiva, son ligeras y estéticas y capaces de asegurar una excelente duración, resistencia y fiabilidad.
Y como Hondarribia es mar, es sal, es aire, es cielo, es tierra, es verde y es azul, a la hora de elegir un color para pintar el interior de este nuevo hogar, decidimos ir , precisamente, a por el azul. El resultado ha sido unos espacios (habitaciones fundamentalmente) llenas de luz, color, paz y amor.
Un hogar mirando al mar. Una nueva casa con vistas al Cantábrico.